Retos para Bajar de Peso Después de los 35
Bajar de peso nunca es fácil, especialmente después de los 35. Descubre mi experiencia personal con los retos para perder peso, el estrés laboral y los días de baja energía.
CONSEJOS DE ADULTOBAJAR DE PESOESTRÉS
Dario Obando
1/17/20253 min read


Introducción:
Bajar de peso nunca es sencillo, pero después de los 35, las cosas parecen volverse aún más complicadas. En mi caso, el camino no ha sido recto ni perfecto. Entre el estrés laboral, los medicamentos que tomo y los días donde simplemente no tengo energía, he tenido que aprender a aceptar que mi progreso no siempre será lineal. Este post es para compartir mi experiencia, porque sé que muchos de ustedes también están enfrentando retos similares. No estoy aquí para decirles que tengo todas las respuestas, sino para que vean que no están solos en este proceso.
La lucha con las expectativas
Cuando comencé este proceso, tenía una idea fija de cómo "debería" ser: bajar peso de forma constante, sentirme más activo y, por supuesto, verme mejor en el espejo. Pero la realidad fue diferente. Entre semanas con mucho estrés y días donde mi cuerpo simplemente no respondía como quería, aprendí algo importante: bajar de peso no es solo físico, es emocional y mental también.
Muchos factores, como la edad y los medicamentos, juegan un papel crucial. Aceptar esto no fue fácil, pero es el primer paso para ser más compasivo conmigo mismo.
Cómo el estrés y los medicamentos afectan el progreso
El estrés laboral es un gran enemigo en este proceso. Hay días en los que el trabajo se siente abrumador, y mi respuesta automática es buscar consuelo en la comida o simplemente no tener energía para moverme. Por otro lado, los medicamentos que tomo también afectan mi metabolismo (ya habláremos en detalle en otra publicación), algo que no siempre se menciona en las conversaciones sobre pérdida de peso.
Pero esto no significa que sea imposible. He aprendido a identificar mis días más complicados y a buscar maneras de cuidar de mí mismo, como tomar pausas activas en el trabajo, optar por comidas más nutritivas aunque no sean perfectas, y priorizar el descanso.
Mis pequeños logros y lo que he aprendido
A pesar de los altibajos, he logrado cosas que me hacen sentir orgullosa. Ya no se trata solo del número en la báscula. He ganado más energía en mis días buenos, he aprendido a disfrutar de caminar al aire libre, y lo más importante, he dejado de compararme con otros.
Este proceso me ha enseñado que cada pequeño paso cuenta, como elegir agua en lugar de refresco o darme un momento para respirar en medio del caos. Celebrar estos logros me ayuda a mantenerme motivada y a recordar que no necesito ser perfecta para avanzar.
Conclusión:
Mi historia no es sobre una transformación instantánea o perfecta, sino sobre aprender a ser amable conmigo misma mientras avanzo. Cada reto que he enfrentado me ha dado la oportunidad de crecer y entender que el progreso no siempre es visible, pero siempre es valioso.
Si estás pasando por algo similar, quiero que sepas que no estás solo. Nuestro camino puede tener altibajos, pero lo importante es seguir avanzando, incluso en los días difíciles.


¿Te identificas con mi historia? Cuéntame en los comentarios cuáles han sido tus mayores retos en este proceso y cómo los estás enfrentando. Me encantaría leerte.
Enlaces de interes:
https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/perdida-peso
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/obesity-and-overweight
https://www.revistagq.com/cuidados/articulo/perder-peso-30-anos-hombre
https://www.mayoclinic.org/es/healthy-lifestyle/mens-health/in-depth/belly-fat/art-20045685